Bebita
Nuev@ Applesan@
¿Qué es una marca como Apple? Los puntos clave
Hay muchos factores que la caracterizan a una marca para construir el éxito, a continuación algunos de los factores clave.
La estrategia representa a la marca
Y no puede existir una marca si no hay estrategia. Esto quiere decir que si se trata de una marca de gran consumo ejemplo de Coca-Cola, la marca son sus productos y lo que representan.
La famosa bebida con sede en Atlanta no se identifica con un mero refresco sino que va más allá y cuando se habla de Coca-Cola se habla de felicidad y diversión, en este caso asociada a gente de todas las edades.
Sin salir del sector de las bebidas, el ejemplo de Red Bull es uno de los más claros, ya que a pesar de ser de un refresco no se trata de saciar la sed, sino que representa un estilo de vida.
En este caso su estrategia de asociación con los deportes de riesgo ha definido una marca de las más reconocidas del planeta.
Alejados de los productos tangibles, el caso más significativo es el de las ONGs, ya que la marca en este caso son sus aspiraciones y el progreso realizado en la conquista de las mismas.
Una marca es su servicio al cliente
Es por ello por lo que muchas empresas le dan tanta importancia a este ámbito y debe ser un aspecto en el que impere la uniformidad y la cordura. Si hablamos de una ONG y los donantes que se ponen en contacto con la organización se encuentran con un contestador telefónico, esa va a ser la marca que quede representada.
Esta es la razón por la cual en la mayoría de compañías que cuentan con un servicio importante hacia el cliente también las de delivery hacen hincapié en el uso de uniformes con el fin de mejorar, al menos visualmente, parte del servicio al consumidor.
Una marca es su forma de hablar
Su lenguaje, su forma de dirigirse al público. Lo primero y fundamental es que la marca debe corresponderse con lo que dice de sí misma para no confundir al público con mensajes incongruentes que provocarían una pérdida de valor enorme.
En este punto entran en juego la publicidad y la comunicación en conjunto que emana desde la compañía, parte fundamental dentro de la estrategia que nos va a representar.
Así, existen casos como la crisis que vivió Mercedes hacia 1998 debido a los fallos en las pruebas de `alce´, consistente en trazar una S de forma violenta para comprobar la tracción del vehículo. O la mala explicación de la pérdida de llamadas del iPhone 4 y su problema en el diseño del aparato.
Una mala comunicación, primero culpando a los neumáticos, otros alegando que todos los móviles también pierden señal y luego aplicando la `Ley del silencio´, no es acorde con una compañía cuya marca es sinónimo de fiabilidad, seguridad y confianza.
La Comunicación de crisis es una prueba de fuego para muchas empresas, ya que es en esos momentos cuando se someten a examen sus habilidades comunicativas; y es ahí donde muchas suspenden.
Una marca son sus herramientas de comunicación
Al igual que su lenguaje le identificará frente a los consumidores y la sociedad en general, las herramientas que utilicen para la transmisión de los mismos es igual de importante. Pueden ser carteles, publicidad en el punto de venta, su ambientación, mensajes en el contestador… todo debe ir en concordancia ya que ayudará a construir la marca.
Un ejemplo claro puede encontrarse en una marca que utilice la televisión como soporte publicitario. Si se trata de una compañía que defiende los valores de respeto hacia el medio ambiente y hacia los animales, no es lógico publicitarse en un espacio de un programa dedicado a la caza y la pesca, por ejemplo. El mensaje es confuso y el cliente puede desubicarse ante él.
Una marca es su gente
Qué mejor representación de una marca que el factor humano que la conforma. Es fundamental contar con un equipo cualificado pero que a la vez sienta los colores de la compañía, por lo que es importante aportarles una buena formación.
En este sentido, uno de los sectores que más experiencia cuenta es el de la franquicia, experto en transmitir un Know-How empresarial a los emprendedores que deciden apostar por una determinada marca.
Algunos expertos señalan esta parte del proceso como la esencia de la franquicia, ya que uno de los factores fundamentales para este modelo empresarial es que un cliente no encuentre apenas diferencia a la hora de entrar un alguno de los centros que la enseña tenga repartidos.
Una marca son sus instalaciones
En algunos casos, las oficinas son una fiel representación de la marca que les ampara, y al igual que el resto de características, deben ser acordes con la imagen de la compañía.
Un claro ejemplo de esta representación se encuentra en las oficinas del gigante Google, en las que no falta detalle. Mesas de pinball y de billar, toboganes para comunicar plantas, gimnasio y libertad para elegir los horarios son algunas de las peculiaridades que se pueden encontrar, por ejemplo, en sus oficinas de Zurich.
Se trata de una fiel representación de los valores de marca que representan a la compañía: modernidad, libertad, etc.
Una marca también es su logo
No todas pero sí muchas de las empresas con presencia en todo el planeta han visto que parte de su éxito se debía al diseño de su logotipo.
Unas por su facilidad de representación caso de Nike, otras por su universalidad la manzana mordida de Apple al incluir a todos los gays y lesbianas, y otros por su originalidad Mcdonald´s, todas ellas con el fin de ser algo más que una mera representación visual.
Vía | Harvard Business Review
Hay muchos factores que la caracterizan a una marca para construir el éxito, a continuación algunos de los factores clave.
La estrategia representa a la marca
Y no puede existir una marca si no hay estrategia. Esto quiere decir que si se trata de una marca de gran consumo ejemplo de Coca-Cola, la marca son sus productos y lo que representan.
La famosa bebida con sede en Atlanta no se identifica con un mero refresco sino que va más allá y cuando se habla de Coca-Cola se habla de felicidad y diversión, en este caso asociada a gente de todas las edades.
Sin salir del sector de las bebidas, el ejemplo de Red Bull es uno de los más claros, ya que a pesar de ser de un refresco no se trata de saciar la sed, sino que representa un estilo de vida.
En este caso su estrategia de asociación con los deportes de riesgo ha definido una marca de las más reconocidas del planeta.
Alejados de los productos tangibles, el caso más significativo es el de las ONGs, ya que la marca en este caso son sus aspiraciones y el progreso realizado en la conquista de las mismas.
Una marca es su servicio al cliente
Es por ello por lo que muchas empresas le dan tanta importancia a este ámbito y debe ser un aspecto en el que impere la uniformidad y la cordura. Si hablamos de una ONG y los donantes que se ponen en contacto con la organización se encuentran con un contestador telefónico, esa va a ser la marca que quede representada.
Esta es la razón por la cual en la mayoría de compañías que cuentan con un servicio importante hacia el cliente también las de delivery hacen hincapié en el uso de uniformes con el fin de mejorar, al menos visualmente, parte del servicio al consumidor.
Una marca es su forma de hablar
Su lenguaje, su forma de dirigirse al público. Lo primero y fundamental es que la marca debe corresponderse con lo que dice de sí misma para no confundir al público con mensajes incongruentes que provocarían una pérdida de valor enorme.
En este punto entran en juego la publicidad y la comunicación en conjunto que emana desde la compañía, parte fundamental dentro de la estrategia que nos va a representar.
Así, existen casos como la crisis que vivió Mercedes hacia 1998 debido a los fallos en las pruebas de `alce´, consistente en trazar una S de forma violenta para comprobar la tracción del vehículo. O la mala explicación de la pérdida de llamadas del iPhone 4 y su problema en el diseño del aparato.
Una mala comunicación, primero culpando a los neumáticos, otros alegando que todos los móviles también pierden señal y luego aplicando la `Ley del silencio´, no es acorde con una compañía cuya marca es sinónimo de fiabilidad, seguridad y confianza.
La Comunicación de crisis es una prueba de fuego para muchas empresas, ya que es en esos momentos cuando se someten a examen sus habilidades comunicativas; y es ahí donde muchas suspenden.
Una marca son sus herramientas de comunicación
Al igual que su lenguaje le identificará frente a los consumidores y la sociedad en general, las herramientas que utilicen para la transmisión de los mismos es igual de importante. Pueden ser carteles, publicidad en el punto de venta, su ambientación, mensajes en el contestador… todo debe ir en concordancia ya que ayudará a construir la marca.
Un ejemplo claro puede encontrarse en una marca que utilice la televisión como soporte publicitario. Si se trata de una compañía que defiende los valores de respeto hacia el medio ambiente y hacia los animales, no es lógico publicitarse en un espacio de un programa dedicado a la caza y la pesca, por ejemplo. El mensaje es confuso y el cliente puede desubicarse ante él.
Una marca es su gente
Qué mejor representación de una marca que el factor humano que la conforma. Es fundamental contar con un equipo cualificado pero que a la vez sienta los colores de la compañía, por lo que es importante aportarles una buena formación.
En este sentido, uno de los sectores que más experiencia cuenta es el de la franquicia, experto en transmitir un Know-How empresarial a los emprendedores que deciden apostar por una determinada marca.
Algunos expertos señalan esta parte del proceso como la esencia de la franquicia, ya que uno de los factores fundamentales para este modelo empresarial es que un cliente no encuentre apenas diferencia a la hora de entrar un alguno de los centros que la enseña tenga repartidos.
Una marca son sus instalaciones
En algunos casos, las oficinas son una fiel representación de la marca que les ampara, y al igual que el resto de características, deben ser acordes con la imagen de la compañía.
Un claro ejemplo de esta representación se encuentra en las oficinas del gigante Google, en las que no falta detalle. Mesas de pinball y de billar, toboganes para comunicar plantas, gimnasio y libertad para elegir los horarios son algunas de las peculiaridades que se pueden encontrar, por ejemplo, en sus oficinas de Zurich.
Se trata de una fiel representación de los valores de marca que representan a la compañía: modernidad, libertad, etc.
Una marca también es su logo
No todas pero sí muchas de las empresas con presencia en todo el planeta han visto que parte de su éxito se debía al diseño de su logotipo.
Unas por su facilidad de representación caso de Nike, otras por su universalidad la manzana mordida de Apple al incluir a todos los gays y lesbianas, y otros por su originalidad Mcdonald´s, todas ellas con el fin de ser algo más que una mera representación visual.
Vía | Harvard Business Review