maxim
@maxim_apps
Mueren dos guardias civiles y su intérprete en un tiroteo
Mueren dos guardias civiles y su intérprete en un tiroteo
os guardias civiles destinados en Afganistán -un capitán y un alférez- y su intérprete -nacionalido español- han fallecido este miércoles en un tiroteo en la provincia de Badghis, al noroeste de ese país, han informado fuentes del instituto armado. Esta información ha sido confirmada por
Se trata del capitán José María Galera Córdoba, de 33 años de edad, nacido en Albacete, y su compañero, el alférez Leoncio Bravo Picayo, de 34 años y natural de A Coruña. Forman parte del Grupo de Acción Rural de la Guardia Civil, con base en Logroño, desplazado a Afganistán para tareas de formación de la Policía desde marzo.
otras hablan de un agente- . El gobernador policial de la zona "estaba todo planeado", dijo Dilbar Jan Arman, que acusó a los insurgentes de haber orquestado tanto el tiroteo como la posterior manifestación que tuvo lugar en las calles de la capital provincial, Qala-i-Naw.
Los talibán han confirmado esta teoría al atribuirse la autoría del ataque a través de un comunicado.
El ataque tuvo lugar al inicio de una clase de formación que la Guardia Civil impartía a la Policía afgana en la sede del Equipo de Reconstrucción Provincial (PRT) que las tropas españolas tienen en la capital provincial, Qala-i-Naw.
El supuesto policía afgano, Ghulam Sakhi, acudió al cursillo del PRT armado con pistolas, por lo que los formadores españoles le dieron el alto en la entrada, según el vicegobernador de Badghis, Abdul Ghani Sabri.
En ese momento, Sakhi echó mano de su arma y, antes de ser muerto por las tropas españolas presentes en el lugar, acabó con las vidas de dos guardias civiles y de un intérprete nacionalizado español
Otros guardias civiles españoles respondieron a la agresión y abrieron fuego contra el tirador, matándolo.Como el tiroteo ocurrió en un curso de entrenamiento, en un principio se habló que el atacante era un agente afgano al que entrenaban los guardias civiles.
Manifestación contra los españoles
Tras conocer la muerte de Sakhi, unas 2.000 personas se manifestaron en las calles de la ciudad y, según testigos y fuentes oficiales, incendiaron viviendas, rompieron las ventanas de la oficina del gobernador y lanzaron proclamas contra las tropas extranjeras. Las tropas españolas tuvieron que disparar al aire para disperasar a los manifestantes.
La Policía ya ha controlado la situación en gran parte de la Qala-i-Naw, aunque un grupo más reducido de manifestantes -unos 200, según el Gobierno español- llegó a las cercanías del PRT. "El PRT no ha sufrido daños. Sólo algunas tiendas cercanas han resultado dañadas", dijo Arman.
Fuentes gubernamentales en Madrid dijeron que los civiles no trataron de tomar la base en ningún momento, y que fueron informados por megafonía de lo sucedido, aunque los concentrados reclamaron la devolución del cadáver del agresor afgano.
Asimismo y según las fuentes del Gobierno, el coronel Trascasa y comandante de la base ha mantenido conversaciones con las autoridades civiles y el jefe de la policía afgana, que se ha desplazado al lugar.
Hasta el momento, 92 españoles han muerto en el transcurso de la misión desplegada en Afganistán desde el año 2002, si se incluyen los 62 fallecidos en el accidente de aviación del Yak-42.
Mueren dos guardias civiles y su intérprete en un tiroteo
os guardias civiles destinados en Afganistán -un capitán y un alférez- y su intérprete -nacionalido español- han fallecido este miércoles en un tiroteo en la provincia de Badghis, al noroeste de ese país, han informado fuentes del instituto armado. Esta información ha sido confirmada por
Se trata del capitán José María Galera Córdoba, de 33 años de edad, nacido en Albacete, y su compañero, el alférez Leoncio Bravo Picayo, de 34 años y natural de A Coruña. Forman parte del Grupo de Acción Rural de la Guardia Civil, con base en Logroño, desplazado a Afganistán para tareas de formación de la Policía desde marzo.
otras hablan de un agente- . El gobernador policial de la zona "estaba todo planeado", dijo Dilbar Jan Arman, que acusó a los insurgentes de haber orquestado tanto el tiroteo como la posterior manifestación que tuvo lugar en las calles de la capital provincial, Qala-i-Naw.
Los talibán han confirmado esta teoría al atribuirse la autoría del ataque a través de un comunicado.
El ataque tuvo lugar al inicio de una clase de formación que la Guardia Civil impartía a la Policía afgana en la sede del Equipo de Reconstrucción Provincial (PRT) que las tropas españolas tienen en la capital provincial, Qala-i-Naw.
El supuesto policía afgano, Ghulam Sakhi, acudió al cursillo del PRT armado con pistolas, por lo que los formadores españoles le dieron el alto en la entrada, según el vicegobernador de Badghis, Abdul Ghani Sabri.
En ese momento, Sakhi echó mano de su arma y, antes de ser muerto por las tropas españolas presentes en el lugar, acabó con las vidas de dos guardias civiles y de un intérprete nacionalizado español
Otros guardias civiles españoles respondieron a la agresión y abrieron fuego contra el tirador, matándolo.Como el tiroteo ocurrió en un curso de entrenamiento, en un principio se habló que el atacante era un agente afgano al que entrenaban los guardias civiles.
Manifestación contra los españoles
Tras conocer la muerte de Sakhi, unas 2.000 personas se manifestaron en las calles de la ciudad y, según testigos y fuentes oficiales, incendiaron viviendas, rompieron las ventanas de la oficina del gobernador y lanzaron proclamas contra las tropas extranjeras. Las tropas españolas tuvieron que disparar al aire para disperasar a los manifestantes.
La Policía ya ha controlado la situación en gran parte de la Qala-i-Naw, aunque un grupo más reducido de manifestantes -unos 200, según el Gobierno español- llegó a las cercanías del PRT. "El PRT no ha sufrido daños. Sólo algunas tiendas cercanas han resultado dañadas", dijo Arman.
Fuentes gubernamentales en Madrid dijeron que los civiles no trataron de tomar la base en ningún momento, y que fueron informados por megafonía de lo sucedido, aunque los concentrados reclamaron la devolución del cadáver del agresor afgano.
Asimismo y según las fuentes del Gobierno, el coronel Trascasa y comandante de la base ha mantenido conversaciones con las autoridades civiles y el jefe de la policía afgana, que se ha desplazado al lugar.
Hasta el momento, 92 españoles han muerto en el transcurso de la misión desplegada en Afganistán desde el año 2002, si se incluyen los 62 fallecidos en el accidente de aviación del Yak-42.