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Estilismo de Casa Josephine, fotografía Iñigo Aragón
Vamos a recorrer juntos la Casa Josephine. Se trata de una casona rural, ubicada en La Rioja, España, que armaron el diseñador de moda y fotógrafo, Iñigo Aragón, y el guía de turismo y crítico literario, Pablo López Navarro.
Ellos emprendieron este proyecto lleno de ideas frescas, reciclaje y un estilo muy acertado para este tipo de construcción. La ubicacion de la casa es perfecta para quienes van a recorrer la región: se encuentra en el valle central de La Rioja, al lado de las bodegas más interesantes (Marqués de Riscal, de Frank Gehry, y Ysios, de Santiago Calatrava), a quince minutos de la capital y al lado del Camino de Santiago. ¡El paisaje es lindisimo!
Casa Josephine cuenta con cuatro plantas en torno a una escalera. Fue edificada a fines del siglo XIX y reformada en 1920. Su distribución es bastante racional, geométrica y funcional.
Excepto la resolución de los aspectos técnicos -como la colocación de tejas, la fontanería y electricidad-, todas las modificaciones las realizaron Iñigo y Pablo: pintura, decoración, distribución de espacios, arreglos de carpintería, telas y retapizado de muebles. No tenían experiencia previa: inspirados en las ideas del movimiento Arts and Crafts, que valora sobre todo la dignidad del trabajo manual, fueron aprendiendo a medida que avanzaron en la obra.
El resultado es un espacio relajado, nada pretencioso, con una decoración liviana, sin arrogancia.
Cada una de las piezas de la decoración fue elegida para contribuir a la atmósfera general, más que por su valor o belleza individual. Por eso hay de todo en la casa: desde una lámpara de lata hecha en Senegal y un aparador del siglo XVIII, hasta un mostrador de Ikea y lámparas rescatadas de una discoteca de los años 70.
Muchos de los objetos y muebles fueron encontrados en anticuarios, brocantes, rastros y sitios de segunda mano del norte de España.
¿Qué les parece la casa Josephine?
Vamos a recorrer juntos la Casa Josephine. Se trata de una casona rural, ubicada en La Rioja, España, que armaron el diseñador de moda y fotógrafo, Iñigo Aragón, y el guía de turismo y crítico literario, Pablo López Navarro.
Ellos emprendieron este proyecto lleno de ideas frescas, reciclaje y un estilo muy acertado para este tipo de construcción. La ubicacion de la casa es perfecta para quienes van a recorrer la región: se encuentra en el valle central de La Rioja, al lado de las bodegas más interesantes (Marqués de Riscal, de Frank Gehry, y Ysios, de Santiago Calatrava), a quince minutos de la capital y al lado del Camino de Santiago. ¡El paisaje es lindisimo!
Casa Josephine cuenta con cuatro plantas en torno a una escalera. Fue edificada a fines del siglo XIX y reformada en 1920. Su distribución es bastante racional, geométrica y funcional.
Excepto la resolución de los aspectos técnicos -como la colocación de tejas, la fontanería y electricidad-, todas las modificaciones las realizaron Iñigo y Pablo: pintura, decoración, distribución de espacios, arreglos de carpintería, telas y retapizado de muebles. No tenían experiencia previa: inspirados en las ideas del movimiento Arts and Crafts, que valora sobre todo la dignidad del trabajo manual, fueron aprendiendo a medida que avanzaron en la obra.
El resultado es un espacio relajado, nada pretencioso, con una decoración liviana, sin arrogancia.
Cada una de las piezas de la decoración fue elegida para contribuir a la atmósfera general, más que por su valor o belleza individual. Por eso hay de todo en la casa: desde una lámpara de lata hecha en Senegal y un aparador del siglo XVIII, hasta un mostrador de Ikea y lámparas rescatadas de una discoteca de los años 70.
Muchos de los objetos y muebles fueron encontrados en anticuarios, brocantes, rastros y sitios de segunda mano del norte de España.
¿Qué les parece la casa Josephine?
