maxim
@maxim_apps
Ya se puede vender fuera de la tienda oficial Apple, por ejemplo, en formato suscripción. Ahora los editores pueden ofrecer acceso al contenido fuera de la aplicación y sin necesidad de tenerlo también disponible en la App Store.
La única restricción con la nueva normativa es que las aplicaciones no pueden incluir el botón 'comprar' enlazado a la oferta de suscripción externa, lo que dificulta que los usuarios conozcan este otro modelo si no se consiguen otros canales de comunicación con la compañía.
La nueva norma, la 11.14, dice así:
Otra reinterpretación de las normas dice que permitirá a los editores poner el precio a las suscripciones in-apps más alto de lo que se vende fuera de la App Store para que pueda recuperarse ese 30% que cobra Apple.
Esto permitirá a los desarrolladores llegar al usuario que busca un buen precio esforzándose y al que se conforma con lo que ofrecer la tienda oficial.
Se trata de una medida muy demandada por los desarrolladores, grandes y pequeños, que han visto siempre la comisión del 30% que Apple cobra por cada venta efectuada dentro de la tienda oficial como una barrera muy difícil de superar.
En algunos negocios, este canon se come completamente el margen de beneficio destinado a la supervivencia de la empresa.
La única restricción con la nueva normativa es que las aplicaciones no pueden incluir el botón 'comprar' enlazado a la oferta de suscripción externa, lo que dificulta que los usuarios conozcan este otro modelo si no se consiguen otros canales de comunicación con la compañía.
La nueva norma, la 11.14, dice así:
Las aplicaciones pueden leer o poner en marcha contenido aprobado (específicamente revistas, periódicos, libros, audios, música y vídeo) que ha sido suscrito o comprado fuera de la app, siempre y cuando no haya un botón o enlace externo en la aplicación para comprar este contenido aprobado. Apple no recibirá ninguna parte de los ingresos de este contenido aprobado que se compre o se suscriba fuera de la aplicación.
Otra reinterpretación de las normas dice que permitirá a los editores poner el precio a las suscripciones in-apps más alto de lo que se vende fuera de la App Store para que pueda recuperarse ese 30% que cobra Apple.
Esto permitirá a los desarrolladores llegar al usuario que busca un buen precio esforzándose y al que se conforma con lo que ofrecer la tienda oficial.
Se trata de una medida muy demandada por los desarrolladores, grandes y pequeños, que han visto siempre la comisión del 30% que Apple cobra por cada venta efectuada dentro de la tienda oficial como una barrera muy difícil de superar.
En algunos negocios, este canon se come completamente el margen de beneficio destinado a la supervivencia de la empresa.